Las energías alternativas
son aquellas fuentes de energía diferentes de las
tradicionales o
clásicas. No existe una definición consensuada al respecto de qué tecnologías
forman parte de este concepto. Para algunos expertos, las energías
alternativas serían equivalentes a las energías sostenibles,
mientras que otras definiciones más amplias consideran como energías
alternativas a todas las fuentes de energía que no implican la
quema de combustibles fósiles como
el carbón, el gas y el petróleo. En esta definición además de las energías sostenibles también estaría incluida también la energía nuclear.
Las energías tradicionales o clásicas están ligadas a las
energías empleadas durante los años de la economía del petróleo,
básicamente el carbón, gas y petróleo. Algunas personas también pueden
considerar a la energía nuclear como energía tradicional. Desde hace unos años
con la llegada de la tercera
revolución industrial, la
utilización de energías alternativas se convierte en una necesidad
ante el continuo aumento de la demanda y la necesidad de limitar la emisión de
gases de efecto
invernadero. En cualquiera de las definiciones anteriores, las energías
alternativas no emiten CO2 y tienen una capacidad de generación ilimitada (en
el caso de las renovables). En caso de considerar la energía nuclear de fisión
como energía alternativa, cumple con la condición de no emisión de CO2 pero hay
que tener en cuenta la peligrosidad de la instalación y de los residuos, por lo
que realmente es difícil considerarla como alternativa. Existen otras muchas
tecnologías que SI que son una alternativa y no generan contaminación ni tienen
problemas de peligrosidad radioactiva.
Por el contrario la energía de fusión se
puede considerar una verdadera energía alternativa ya que su capacidad de generación
es prácticamente ilimitada, no emite contaminación a la atmósfera ni consume
combustibles fósiles, su principal desventaja es la falta de inversión a nivel
internacional para profundizar en la investigación y aplicación práctica de
esta tecnología. El proyecto ITER es el camino para mejorar este inconveniente.
Teniendo en cuenta lo anterior, y englobando todas
las definiciones posibles para energías alternativas, se puede llegar a generar la
siguiente lista de energías alternativas:
- Energías Renovables o Sostenibles (Solar
Térmica, Solar Fotovoltaica, Termosolar, Eólica, Geotérmica,
Maremotérmica, Mareomotriz, Undimotriz, Bioenergía)
- Energía Hidroeléctrica
- Energía Nuclear de Fisión
- Energía de Fusión
Las energías alternativas pueden ser las energías
que se utilicen en un futuro próximo ya que resuelven los problemas de las energías tradicionales (suministro
limitado, contaminación o peligrosidad). Para que estas energías sean utilizadas de manera
masiva se necesita que los organismos internacionales, gobiernos y legisladores
nacionales e internacionales promuevan una legislación favorable y que no perjudique su
utilización. Un claro ejemplo de que esto no está sucediendo es la situación
de la NO regulación del balance neto en España, una norma que hace dos años que
debería haber salido, y que favorecería la utilización masiva de la energía
solar fotovoltaica en ámbitos domésticos si finalmente se regula de manera
adecuada. Sólo habría que regularla de manera similar a como está hecho en
otros países y no intentar inventar nada nuevo que beneficie a las empresas del
oligopolio eléctrico y perjudique a los consumidores que quieran acogerse a
esta manera de generar electricidad.